viernes, 25 de marzo de 2011

"La primera gira"

Después de varios meses de no tan calma espera, con el Sec. General recientemente designado por el conjunto de la organización después de haber arribado a un acuerdo que seguramente formará parte de la historia de las organizaciones políticas juveniles del partido radical (es decir, que probablemente sólo nosotros nos lleguemos a acordar) nos dispusimos a hacer eso que todo el mundo nos decía, y que nosotros asumíamos, era nuestra misión principal... Recorrer el país de punta a punta.
- Vamos juntos, dijo el negro.
- Yo salgo desde Rosario, le aclaré. Tengo que estar en la apertura del nosecuanto Congreso Internacional de Democracia. Claro, en ésa misma noche gélida puntana, yo fui electo Vice Presidente de la FUA.
De ésta manera nos dispusimos, emocionados, a emprender nuestra primer gira por el Noroeste Argentino: Jujuy, Salta, Tucumán y Santiago del Estero. Todo juntito y de corrido en el lapso de 1 semana!!!! :S
Si, una semana para recorrer miles de kilómetros.

El primer desafío fue conseguir que nuestros generosos mayores dejaran de pelearse por ayudarnos y finalmente decidieran pucherearnos con 4 tramos de esos que los podés canjear por pasajes en semi-cama o en triciclo... (faltos de inteligencia, optamos por los colectivos...).
La idea era salir desde ciudades diferentes, en el mismo colectivo. Léase... el negro salía unas horas antes desde Bs As y yo tomaba el mismo coche en Rosario, cuando este pasaba por allí. La idea era genial... claro, la ejecución no fue tal cual la calculamos...

El negro tuvo un suceso en el camino (relato que le corresponde a el completar) que no le permitió tomar exactamente el colectivo estipulado... A mi en cambio, simplemente me ocurrió que mi coche estaba "demorado". Después de una hora y media de espera en la siesta rosarina llegó finalmente el coche al que me subí ansioso porque iba a encontrar a mi compañero de viaje (recién allí se nos ocurre llamarnos por  teléfono para comentarnos que no viajaríamos juntos, pero que llegaríamos con pocas horas de diferencia a San Salvador de Jujuy... el día siguiente. Era un lunes.

Éste fue el primero de muchos, y claro, fue en éste donde me dí cuenta que no hay batería que resista 24hs de viaje... Ni la notebook, ni el celilar, ni el mp3... y que acarrear 3 libros distintos para el viaje no sirve de nada si te la pasás durmiendo como morsa o agotando la batería de todos tus implementos electrónicos, al punto de quedar estúpidamente incomunicado. Eso sí, en aquellas épocas aún fumaba, y si hay algo de bueno que tienen los choferes de los bondis de viajes largos es que saben comprender las penas que aquejan a sus pasajeros: Me dejaban fumar en la cabina!!! (arranqué con un puchito tímido pasando por tucumán, para cuando llegamos a Jujuy ya estábamos como chanchos en la canina cagándonos de risa y pitando)

Y hablando de chanchos... creo que fue el único tipo de animales que no subió en las últimas etapas del viaje..., los últimos, no sé, 200km? Y los bichitos no se duermen... no no, y tampoco huelen bien. Menos con los 33grados que hacía arriba del bondi dado que se rompió el aire acondicionado...

Es así que fumando mi último puchito, con la remera arremangada, descalzo y con el short que me había cambiado por el jean que llevaba durante la primer etapa del viaje (si, arriba del bondi, en mi asiento, a la vista de todo el mundo lo hice, y que? ellos llevaban gallinas y yo no podía quejarme!!!) es que finalmente divisé el cartel de entrada a la bella ciudad de San Salvador de Jujuy...

Llegado a la terminal restaba encontrarme con mi contacto... al que no podía contactar dado que no tenía batería en mi celular, y decirle que teníamos que esperar al negro, que no sabía bien a que hora, pero que "llegaba en un rato"...

Y por ahora, acá me detengo... pronto contaré más, porque ahora sí, viajamos juntos, por jujuy, salta, tucumán y santiago del estero con el compañero negro, el secretario general...

emiliano

jueves, 10 de marzo de 2011

Viaje Inaugural...

En este blog iremos volcando experiencias, recuerdos, historias, pensamientos, reflexiones... todas ellas originadas durante vastas horas de viaje, mediante un vínculo sumamente estrecho entre las nalgas y el tapizado (gastado o no) de esa tela calurosa, mullidita y nunca discreta en colores que recubre los asientos de los colectivos de media y larga distancia.
Habrá relatos diurnos, otros nocturnos. Los detalles quedarán librados a la capacidad narrativa del autor del mismo, las interpretaciones libradas a las más recónditas y alucinógenas capacidades imaginativas de los lectores.

Aquí comenzamos el viaje, y cada distancia sumará a nuestro #RelatoViajero...